Fueron llevados al tribunal Basmanni de la capital de Rusia, donde se les imputaron cargos de terrorismo.El presidente ruso prometió que “todos los responsables serán castigados”.Uno de los sospechosos admitió haber cobrado medio millón de rublos por el atentado.
Así la policía de Vladimir Putin trasladaba a los detenidos por el atentado en Moscú
