Por medidas de seguridad, el español no pudo hacer el tradicional retrato del campeón de Roland Garros.Le preguntaron si prefiere Wimbledon o los Juegos Olímpicos y su respuesta fue contundente.
Tras hacer historia en París, Alcaraz se quedó con las ganas de la tradicional foto en la Torre Eiffel pero ya tiene un nuevo sueño
